El sol del verano es un chute de vitamina para las malas hierbas que tienden a adueñarse de lo ajeno. Y si no que le pregunten a los vecinos del residencial Valenzuela, que llevan semanas tratando de evitar que la vegetación campe sus anchas en aceras, fincas urbanas y espacios públicos.
Pero la maleza no solo nace y crece sin moderación en esta y otras zonas de la ciudad; sino que la tendencia también es que invada todos aquellos lugares donde no existe un plan de conservación preventivo, que es lo que ocurre en Linares. «Desbrozaron hace unas semanas, pero sin aspiradoras ni nada, solo cortaron y se marcharon», detalla a este periódico una vecina, cuyo padre, un octogenario residente en una casa cercana a la suya, sufrió una caída cuando fue a tirar la basura y tropezó con la vegetación descontrolada que crece en la calle Diamante. «Por suerte, todo quedó en un susto, pero pudo ser muy grave», lamenta la mujer.
Cuando se mudaron a esta zona de expansión de la ciudad, ubicada entre la Colonia del Sol y La Paz, pensaron que lo hacían a un lugar tranquilo, limpio y saneado. El tiempo les ha quitado la razón. «Nunca ha estado tan mal como ahora. Estamos completamente abandonados», dice otro vecino de la calle Zafiro.
Baldosas sueltas, hierbas en aceras, pavimento levantado y un parque que no se puede definir como tal es el «pan nuestro de cada día» de este y otros muchos lugares alejados del centro de Linares. «Nos toman como ciudadanos de segunda», insisten a este medio.
Es la enésima vez que los vecinos de esta zona denuncian «abandono», «pero no nos hacen ni caso», lamenta el hombre. Y aunque las hierbas son, seguramente, la parte más visual, critican otras cuestiones, como el pavimento levantado en todas las calles por las raíces de los árboles. Una queja que se arrastra de hace años, aunque, últimamente, ha empeorado de manera considerable, a pesar de los escritos presentados en sede municipal.
Su situación es extensible a la Colonia del Sol, Girón, Las Américas y prácticamente todo lo que circunda el Paseo de los Marqueses y la Avenida de España. Así, lo cuestiona el Grupo Municipal de Vox. Su portavoz, Alberto Gragera, junto con la concejal Marina Martínez, ha visitado recientemente la urbanización Valenzuela y ha constatado que las quejas de los residentes son «una muestra más de la dejadez del equipo de Gobierno del Partido Popular». «Necesitan atención urgente», conmina Gragera a la alcaldesa, Auxi del Olmo.
El Ayuntamiento de Linares ha llevado a cabo un plan desbroce y retirada de malas hierbas que, a todas luces, es «insuficiente», en opinión de Vox. «Ahora que tanto promocionan Linares, podemos comprobar que no todas las zonas de la ciudad corren la misma suerte en cuanto al cuidado de sus barrio», lamenta el líder de la formación de Santiago Abascal.
Las malas hierbas asoman entre las baldosas de la acera y por las alcantarillas y son unas intrusas molestas que afean el paisaje urbano, al igual que los solares privados de este núcleo residencial, plagados de maleza, suciedad, roedores e insalubridad. A lo que se suma el alto riesgo de incendio con la llegada de las altas temperaturas, tal y como han advertido desde el Parque de Bomberos en reiteradas ocasiones.
El aspecto de dejadez e insalubridad es alarmante.
La imagen que se proyecta es importante, y la que estamos dando a los que vienen de fuera y sobre todo a los vecinos que viven en la ciudad es vergonzosa.
No creo que cueste mucho emplear a los trabajadores del ayuntamiento a echar una o dos semanas limpiando la periferia, saliendo un poquito del centro, que no sólo eso es Linares.