Linares abre paso al corredor del arroyo Periquito Melchor. Casi dos décadas después de que se dibujase en el planeamiento urbanístico este vial, el Ayuntamiento ha sacado a licitación la demolición de una casa que se interpone en el desarrollo del nuevo corredor que, en un futuro próximo, conectará la Avenida del Pisar, desde la Carretera de Baños, con la calle Debla. Precisamente, el inmueble que tapona esta infraestructura se localiza en esta vía.
Una vez cerrado el acuerdo con la propiedad para su expropiación, la Administración local ha dado la orden para la contratación de la empresa que se encargará de echarla abajo, por un importe de 7.698,13 euros (IVA incluido), según se recoge en el pliego técnico consultado por este periódico.
La vivienda en cuestión está situada en el número 25 de la mencionada calle Debla. Consta de dos plantas (baja más primera) y, actualmente, se encuentra deshabitado, en regulares condiciones y con algunas dependencias deterioradas. Tiene 70 años de antigüedad, de acuerdo con la información catastral. La superficie total del edificio es de 130 metros cuadrados. La empresa adjudicataria de esta licitación deberá derribarla en el plazo de un mes.
El pasado mes de octubre la alcaldesa, Auxi del Olmo, informó a los vecinos de los barrios afectados que su Gobierno estaba trabajando en las dos expropiaciones que son necesarias para finiquitar esta infraestructura de «gran envergadura». La primera ya se encuentra en la fase de licitación para la demolición.
El proyecto de construcción de la segunda fase del corredor del arroyo Periquito Melchor y la canalización del mismo, está financiado con fondos europeos en el marco de la Estrategia de Desarrollo Urbano Sostenible (Edusi), con una inversión de alrededor de 5,5 millones de euros.
Las obras se comenzaron bajo el mandato del PSOE e IU en junio de 2023. En un principio, solo iban a durar ocho meses, pero, por diferentes contratiempos, acumulan muchísimo retraso.
Los trabajos de este proyecto urbanístico de mejora consisten en la construcción de un vial que conecte la Carretera de Baños y la calle Debla, que contará con acerado, una zona de aparcamiento y un carril bici que se unirá al ya existente en la Avenida del Pisar.
Además, las obras llevaban aparejada una infraestructura hidráulica con una red que separará las aguas negras de las aguas de lluvia. De esta manera, se conseguirá la integración de toda la zona en el casco urbano linarense, rompiendo el aislamiento físico que producía el arroyo y la vegetación.
