El pasado mes de julio espeleólogos e investigadores del Instituto Geológico y Minero de España (IGME) descendieron a la galería que se localiza entre el nuevo recinto ferial y la ermita de la Virgen de Linarejos. Su objetivo era datar el año de construcción de las galerías que se encuentran en la zona de la Fuente del Pisar.
Nueves meses después de aquella expedición a las tripas de Linares, se conocen los primeros resultados, que han sido presentados este jueves por el alcalde, Raúl Caro-Accino, en una rueda de prensa. Estos indican de que se trata de «una galería muy antigua que, por su tipología, localización y usos, se ubicaría en un contexto medieval andalusí», según ha avanzado el doctor en Historia Medieval y profesor titular de la Universidad de Granada (UGR), José María Martín Civantos.
Así, estaríamos ante «unas raíces históricas mucho más profundas e interesantes de lo esperado para poder conocer y comprender mejor la fundación y el desarrollo de Linares desde la Edad Media hasta la actualidad», ha añadido el profesor.
Los investigadores, que bajaron a las profundidades de la Fuente del Pisar con miembros de la Asociación Espeleológica Velezana, que este tipo de estructuras resultan «muy complicadas de datar», entre otras cosas porque «se han visto modificadas por diversas renovaciones».
En cualquier caso, el trabajo realizado ha permitido estudiar 484 metros del subsuelo de Linares, de los que 258 corresponden a «areniscas y lutitas triásicas». El resto son granitos paleozoicos alterados.
Asimismo, se han documentado intervenciones de refuerzo del siglo XIX y una inscripción castellana sobre uno de los dinteles de refuerzo, también de la misma época.
El equipo de investigación también ha podido documentar restos de carbón, “lo que supone haber encontrado indicios de la utilización de fuego en el interior de la galería por motivos aún desconocidos». Además, se han encontrado marcas de excavación y huecos de lucernas usadas para la iluminación a lo largo de la galería.
El alcalde ha expresado el agradecimiento de la Administración municipal al equipo de investigación que, durante el pasado año, llevó a cabo dos exploraciones en la galería de la Fuente del Pisar. “Hoy se presenta el resultado de unos trabajos que son ilusionantes para la ciudad”, ha subrayado.
Caro-Accino ha estado acompañado en la comparecencia ante los medios de comunicación de Tomás Peinado, titulado superior especialista en I+D+i del Instituto Geológico y Minero del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (IGME-CSIC); Antonio González, científico titular del IGME-CSIC y el mencionado José María Martín Civantos.
Aunque los trabajos de investigación, en general, sobre la Fuente del Pisar se remontan al año 2001, fue el pasado verano cuando se realizaron las incursiones en la propia galería por parte de los expertos.
Cuando yo era niño, me crie en las cocheras de los tranvías de Linares, por allí pasaba el canal subterráneo, con abundante caudal, sobre el año 1963 o 64 un empleado de los tranvías Rafael …. y otro empleado de La Hortícola Linarense Manuel …, con un farol tranviario de aceite, se metieron en el canal para investigar porque se había producido la merma de caudal, recorrieron bastantes metros, Rafael me comentó años después que cerca de la mina de Venus había otra galería a la izquierda, que desembocaba en un cóncavo que rezumaba bastante agua por la pared de enfrente, volviendo a la galería principal, continuando hacía la fundición de San Luis, en el recorrido observaron varios pozos, que al día de hoy están cegados o tapados en el olivar que hay detrás de la fábrica de aluminio (Alucual, creo que es nombre actual). Le interrogué que me explicara como era el socavón y dijo que era de piedra paredes techo y suelo, y que caminaban por dicho canal, con bastante dificultad en algunos tramos incluso tenían que arrastrase. Concluyendo, deduzco, que el Pozo minero de San Vicente (pozo bomba de la Compañía Minera de Linares) vertía el agua desaguada ha dicho socavón, por aquellos años entró en servicio el socavón general de desagüe hacia la estación de Baeza, y la compañía minera se ahorraba bastantes metros de esfuerzo y energía, abaratando el desagüe.