El presidente de la Diputación de Jaén, Francisco Reyes, avanza que desde la Administración provincial se reivindicará ante la Junta de Andalucía y el Gobierno de España «medidas para paliar los problemas que la escasez de lluvias está ocasionando al sector oleícola provincial».
Así lo ha indicado tras la reunión mantenida con responsables de Cooperativas Agro-alimentarias de Jaén y los sindicatos UGT y CC OO para analizar «la grave situación que atraviesa el campo jiennense tras los últimos años de sequía».
Los representantes de estas entidades han expuesto al presidente de la Diputación algunas de las iniciativas que proponen para aliviar la situación que padece el campo jiennense por la sequía y la producción de la campaña anterior y las escasas previsiones para la próxima.
Así, y entre otras propuestas, han planteado la necesidad de que se adopten las medidas necesarias para reducir la pérdida de empleo prevista para la campaña 2023-24 y la falta de ingresos de las familias que trabajan en el sector de la industria del aceite en la provincia jiennense.
Al respecto, se han referido especialmente a poner en marcha medidas que den cobertura de prestación de desempleo u otras que aporten estabilidad a los más de 3.500 trabajadores y trabajadoras del sector.
Igualmente, han solicitado mecanismos de protección para los empleados que se vean afectados por los acuerdos entre cooperativas para la molturación conjunta como herramienta de disminución de costes y la exención para las industrias oleícolas del pago de la cuota empresarial de la Seguridad Social de aquellos trabajadores incluidos dentro de estas medidas extraordinarias.
Por último, solicitan ayudas de las administraciones públicas, cada una en el ámbito de sus competencias, encaminadas a contrarrestar las pérdidas causadas por la sequía en este sector económico de la provincia.
Estas propuestas se ponen sobre la mesa después de que la cosecha del pasado año se redujera un 62 respeto a la media de los últimos años y la próxima campaña se presente en una línea similar, por lo que serían dos seguidas con una producción muy baja que amenazan la estabilidad del sector por la disminución tanto de los ingresos de los olivicultores como de los jornales.