El expediente de la candidatura de los «Paisajes del Olivar de Andalucía. Historia milenaria de un mar de olivos» a Patrimonio Mundial ha superado la evaluación formal por parte del Centro de Patrimonio Mundial. El presidente de la Diputación, Paco Reyes, ha mostrado su satisfacción y ha valorado que este primer paso «avala el trabajo realizado hasta ahora para presentar un magnífico expediente que merezca el apoyo de la Unesco».
El Ministerio de Cultura ha remitido a la Diputación de Jaén el documento del Centro de Patrimonio Mundial en el que se indica que la Secretaría del Centro de Patrimonio Mundial ha verificado que la candidatura de los Paisajes del Olivar de Andalucía cumple con la integridad exigida a los expedientes de nominación, según ha explicado la institución provincial en un comunicado.
Esta primera evaluación ha consistido en una revisión de los aspectos formales y técnicos, sin entrar a valorar si el bien en cuestión posee el Valor Universal Excepcional y demás cuestiones requeridas para su inscripción la Lista del Patrimonio Mundial.
A partir de ahora, comienza la fase de evaluación. Para ello, se ha enviado copia del expediente al Consejo Internacional de Monumentos y Sitios (Icomos). Está previsto que el proceso de evaluación que llevará a cabo este organismo asesor de la Unesco se realice in situ en otoño de 2024, con el objetivo de que pueda debatirse la inscripción de la candidatura en la lista de bienes en la Asamblea General de la Unesco de 2025.
La candidatura «Paisajes del Olivar de Andalucía. Historia milenaria de un mar de olivos» a Patrimonio Mundial pone el foco en un paisaje cultural, agrario, evolutivo y vivo, cuyos valores a conservar tienen que ver precisamente con la continuidad de su productividad y su sostenibilidad económica, ambiental y social. Un paisaje patrimonial que es «el resultado del esfuerzo de muchos agricultores y agricultoras, que han dedicado su vida al cultivo y cuidado de estos árboles que han permitido y permiten el sustento de muchas familias y territorios en Andalucía», ha puesto de relieve la Diputación.
Este expediente identifica 14 zonas de paisaje cultural, que se han delimitado en función también de la historia de este paisaje: Montoro y su entorno (Córdoba), Molino Ducal San Fernando (El Carpio, Córdoba), Haciendas de Tavera y La Buzona, (Carmona, Sevilla), Hacienda de San Ignacio de Torrequemada (Aljarafe, Sevilla), Haciendas de La Soledad y Guzmán (Los Alcores, Sevilla), Cortijo La Jara (Jerez de la Frontera, Cádiz), bancales de Nigüelas y almazara de La Erilla del Valle de Lecrín (Nigüelas, Granada), Olivares de Santa Catalina (Orcera, Jaén), El Ruedo (Almedinilla, Córdoba), Alfar de Écija (Écija, Sevilla), Cortijo Blanco (Periana, Málaga), Campiñas de Jaén (Porcuna y Lopera, Jaén), Hacienda La Laguna (Baeza, Jaén), y Zuheros (Sierras Subbéticas Córdoba).
Las zonas elegidas ponen de relieve valores «excepcionales», que se concretan en una serie de expresiones materiales e inmateriales que van desde los tipos de parcelas y las variedades de olivar hasta las muestras arqueológicas y arquitectónicas, así como su patrimonio inmaterial, como puede ser la cultura campesina, las tradiciones o los espacios de interpretación, entre otros recursos.