El alcalde de la Estación Linares-Baeza, Melchor Villalba, culmina su primer año de mandato con la «satisfacción» del «trabajo bien hecho» desde «la responsabilidad de cumplir con la palabra dada a los vecinos». En palabras del regidor, la Entidad Local Autónoma (ELA) ha recibido el «impulso transformador que tanto necesitaba». «La Estación ahora es un lugar atractivo para vivir, donde se han mejorado los servicios con más limpieza, más seguridad, más zonas verdes y más participación ciudadana», destaca.
En su balance, Villalba pone, precisamente, a los vecinos en el eje de su gestión. «Ellos son los que nos inspiran. Les hemos partícipes de la actividad municipal. Ellos proponen, nosotros los escuchamos y juntos ejecutamos los proyectos», afirma el mandatario, para sentenciar acto seguido: «Estamos haciendo pueblo».
Más allá de los nuevos equipamientos, el alcalde se queda con el «ambiente de ilusión» que se respira en la Estación. «Estamos dejando atrás determinados estigmas que solo nos hacían protagonistas de las noticias de sucesos. Ahora salimos en los medios por cosas positivas», resalta.
A este respecto pone de relieve la «gran cantidad de actividades sociales, culturales y deportivas» que se están llevando a cabo de la mano de los estacioneros. «Nos hemos dado cuenta que con ingenio y ganas de trabajar se puede hacer mucho», señala no sin antes advertir que Linares-Baeza luchará por cada céntimo que le corresponde «legítimamente en materia de financiación». «De eso que no le quepa la duda a nadie».
Por último, Melchor Villalba, de Independiente por la Estación, reconoce que «queda muchísimo por hacer» y que su objetivo es «cumplir con cada uno de los compromisos adquiridos con la ciudadanía».
