Los vecinos de la calle Cantina de Linares vivieron unos momentos de auténtico caos este viernes a primeras horas de la tarde. Un hombre comenzó a lanzar objetos y a proferir todo tipo de insultos contra los viandantes desde su domicilio de la citada vía, por lo que se vieron obligados a llamar a la Policía Local para que se personara con urgencia en el lugar.
Hasta la zona indicada por los residentes, que se encuentra a unos 150 metros de la Jefatura, se trasladó primero una dotación para verificar los hechos. Una vez comprobados, acudieron más unidades del citado Cuerpo y de la Policía Nacional, que lo primero que hicieron fue establecer un perímetro de seguridad para garantizar la integridad de los peatones, de los vehículos y del propio individuo que se encontraba en un estado de gran alteración, por motivos que, por el momento, se desconocen.
El suceso ocurrió a las 13:30 de este viernes en una vivienda de la calle Cantina, que se localiza en la zona de Huerta de las Heras, Alfonso Poves y Numancia, en pleno casco antiguo. Este sábado se retiraron los últimos restos de cuadros, de botellas, de vasos y hasta de televisores.
Los agentes, según informa la Policía Local, activaron el protocolo para este tipo de casos con el fin de reducir al máximo la posibilidad de que se produzcan daños. A partir de ese momento, comenzaron a negociar con el hombre para que depusiera su actitud, se tranquilizara e hiciera caso a los funcionarios.
Finalmente los policías lograron su propósito y el vecino, del que no han trascendido sus datos de filiación, pudo ser trasladado por los servicios sanitarios a un centro hospitalario para que fuera atendido por los facultativos, de acuerdo siempre con la versión de la Policía Local.
La sorpresa llegó cuando los agentes hallaron en la casa de individuo dos carabinas, así como armas blancas y objetos peligrosos. La actuación se desarrolló sin incidentes adicionales, gracias también, en buena medida, a la colaboración de los vecinos.