Dice el manual que «no hay mejor defensa que un buen ataque». Así lo ha entendido Juan Fernández desde que se inicio el proceso judicial contra el que fuera líder de los socialistas linarenses durante casi 20 años hasta su expulsión en agosto de 2018. Finalmente, ha acabado con una condena de cuatro años de prisión y diez de inhabilitación por malversación de caudales públicos, según la sentencia emitida por la Audiencia Provincial. La condena se produce después de que el jurado que le ha juzgado lo declarara culpable por mayoría el pasado 10 de marzo.
El que fuera también alcalde de Linares ha calificado el escrito de los magistrados de «injusta» e «injustificada», pues a su entender, está basada en «mentiras». «Lo que me han hecho es vergonzoso, es falso y manipulado y con una aplicación de la ley que es denunciable. Yo no me voy a callar y si creéis que habéis acabado de mí… Voy a recurrir lo que sea necesario», ha dicho en una rueda de prensa convocada en la sede de Linares Primero, partido del que es su secretario general.
Recurrirá ante el TSJA
Juan Fernández recurrirá la resolución judicial ante el Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA) y «hasta Estrasburgo si hace falta», ha advertido. En este punto, ha rebatido la sentencia porque los 110 talones que recibió durante siete años estaban firmados la actual vicepresidenta del área económica de la Diputación de Jaén, Pilar Parra, dentro de una cuenta mancomunada.
Para el exalcalde es ilógico que una experta en economía desconociera qué es lo que firmaba, por lo que ha achacado la sentencia a la «connivencia» de poderes políticos y judiciales.
El tribunal considera probado que durante su etapa como regidor «percibió de manera indebida 125.377 euros», cantidad detraída de la partida del Grupo Municipal Socialista, formación que, según la resolución judicial, ignoraba que el alcalde recibiese cantidades de sus fondos. En este sentido, Juan Fernández ha reiterado su inocencia y ha recordado que en sus años de alcalde manejó cientos de millones de euros y «nadie le puede acusar de haber tocado ni un céntimo».
El dirigente ha asegurado que todo esto se debe a su enfrentamiento contra el partido por defender los intereses de la ciudad frente a las administraciones. «Si acabo en la cárcel, será por partirme la cara por Linares, y no doblaré las rodillas», ha enfatizado en más de una ocasión.
Poderes político y judicial
El poder político al que ha señalado es el PSOE, a cuyos dirigentes ha definido como caciques y embusteros, además de traidores. Y para referirse al judicial ha aludido a la querella que ha presentado contra la juez instructora ante el TSJA, que aún no se ha pronunciado. Fernández ha dicho que pone su confianza en los «jueces de los jueces», aunque no se ha mostrado muy optimista: «El poder es el poder y yo soy un pelanas».
Fernández también incidirá en su recurso en el informe de la intervención municipal de Linares que aclara que el dinero percibido no ha supuesto un quebranto contable para las arcas del Ayuntamiento, Administración que no se ha personado en la causa.
No dejará el acta de concejal y apela a los linarenses
Por otro lado, no tiene intención alguna de renunciar a su acta como concejal de Linares Primero e, incluso, ha avanzado su deseo de presentarse como candidato en las próximas elecciones municipales, siempre y cuando así lo deseen los militantes.
Asimismo, ha lanzado un mensaje a los linarenses: «Estoy sufriendo tamaña indefensión e injusticia… Quiero dar un mensaje a los linarenses, puede que en un futuro los necesite y que den la cara por mí, igual que yo la he dado por ellos y por eso me la están partiendo ahora», ha agregado Fernández.
Fotos: Javier Esturillo
