Agentes del puesto de Linares de la Guardia Civil están investigando a un vecino de la ciudad, de 40 años de edad, como presunto autor de un delito contra el patrimonio por expolio en la Mina Fundición de La Tortilla, declarada Bien de Interés Cultural.
Un guardia civil fuera de servicio, que caminaba por la zona, alertó a sus compañeros tras escuchar el ruido de un generador eléctrico que salía de la denominada Torre de Plomos del citado complejo.
Según informa la Benemérita en una nota, el sujeto estaba suministrando energía a una sierra tipo radial con la que estaba cortando las chapas de una puerta de acceso a las instalaciones. El investigado fue sorprendido por la patrulla que se desplazó hasta la fundición minera que, durante la inspección ocular del vehículo, localizó un comprobante de entrega en un centro de reciclaje de la zona de una chapa de gran tamaño, que coincide con la parte que falta en los accesos al complejo.
Personados componentes de Policía Local de Linares, procedieron a la retirada mediante grúa del vehículo, que estaba estacionado en las proximidades de los hechos y utilizado por el investigado, al carecer de ITV y seguro.
En estos momentos, se investiga la procedencia tanto del generador como de las herramientas utilizadas en el expolio, ya que no puede acreditar su lícita procedencia.
Lista Roja del Patrimonio
La Mina-Fundición La Tortilla, ubicada en el paraje conocido como Cortijo de la Vega, a muy pocos kilómetros de la ciudad, fui incluida el pasado año en la Lista Roja de Patrimonio de la Asociación Hispania Nostra, organización que denuncia el ataque y/o deterioro de inmuebles históricos que corren el riesgo de desaparecer en caso de que no se actúe para frenar su estado ruinoso.
Inscrito en el Catálogo General del Patrimonio Histórico Andaluz desde 2012, su «estado es de completo abandono» y «una de sus chimeneas presente grandes grietas y esté en peligro de derrumbe».
Se trata de un Bien de Interés Cultural representativo del patrimonio industrial de la minería andaluza de finales del siglo XIX, que incluye tanto las zonas de los filones como las instalaciones de transformación, el poblado, la red de caminos y los restos del enlace ferroviario con la línea Linares-Puente Genil.
El complejo minero-metalúrgico se construyó entre 1864 y 1896 tras la adquisición de los filones de La Tortilla por el empresario inglés Thomas Sopwith. Traspasado a dos compañías francesas a principios del siglo XX y operativo hasta bien entrada la década de 1950, fue la primera factoría en España que realizó todo el proceso productivo del plomo, desde su extracción hasta la fabricación.
Desde hace mucho tiempo es objeto de continuos saqueos que han sido denunciados por el Ayuntamiento ante las autoridades competentes.
