El Defensor del Pueblo Andaluz, Jesús Maeztu, ha iniciado una actuación de oficio para conocer situación de la población gitana en Linares y las actuaciones que se han impulsado para «salvaguardar sus derechos y favorecer su inclusión en la sociedad». Así se lo ha trasladado a los ayuntamientos de Jaén, Linares y Andújar y a la Diputación de Jaén, según el escrito publicado por este órgano y consultado por El Nuevo Observador.
Maeztu pide información sobre vivienda de titularidad municipal edificada en zonas con necesidad de transformación social para favorecer el alquiler, sobre atención sanitaria y, en especial, la vacunación infantil de la población gitana, sobre la prevención de la violencia de género, sobre la mejora del acceso a los recursos, bienes y servicios sociales, y sobre políticas encaminadas a garantizar la igualdad de trato y la no discriminación, entre otras cuestiones.
Del mismo modo, quiere saber la coordinación y colaboración entre administraciones y entidades vinculadas o que trabajan con la comunidad gitana de la ciudad.
En este punto recuerda que la población gitana se encuentra incluida en los grupos de personas que presentan «mayores indicadores de vulnerabilidad», concurriendo «varios factores que propician situaciones de exclusión que en ocasiones podemos considerar alarmantes».
Esta actuación de oficio también la está llevando a cabo en el resto de provincias andaluzas con el fin de reducir la brecha de desigualdad que sufre esta comunidad y que afecta a todos los ámbitos: laboral, educativo, responsabilidades familiares e incluso en las bajas expectativas y pocas posibilidades de proyección y promoción.
